Adultos
Los cambios que se suceden a lo largo de nuestra vida como adultos pueden generar un desequilibrio en nuestro estado de ánimo, generando sensación de insatisfacción, pensamientos negativos y emociones desagradables. Ponernos en manos de un profesional cualificado, puede ayudarnos a reestablecer nuestra salud mental de forma que podamos afrontar las nuevas etapas con fortaleza, energía y tranquilidad.

Jóvenes

Familia

Salud mental
Los primeros años de la edad adulta son un periodo de exploración personal, configuración de la identidad y nuevos retos académicos y/o laborales.
La desadaptación en alguno de los contextos cotidianos en los que se desenvuelven, puede llevarles a un enorme sufrimiento que les impida alcanzar sus metas vitales. En estos casos, recomendamos solicitar orientación por parte de nuestra psicóloga para consensuar y establecer las metas a conseguir, haciendo uso de estrategias que faciliten la toma de decisiones, aumenten la seguridad en si mismos y permitan la correcta gestión emocional en situaciones que resulten estresantes.
Nuestro trabajo con las familias se centra en facilitar una buena adaptación a los distintas etapas que atraviesan.
A través de estrategias de educación positiva, logramos mejorar la comunicación y convivencia con vuestros hijos con el fin de conseguir enseñarles todos los aprendizajes que les llevarán a ser adultos responsables, equilibrados y felices.
Asimismo, trabajamos en situaciones que pueden desadaptar a los niños/as o adolescentes, como pueden ser divorcios, separaciones o reestructuraciones familiares, en las que se agregan nuevos miembros. Nuestro objetivo es facilitar la transición a la nueva situación de forma fluida y sana, favoreciendo su adaptación.
Como adultos, nos enfrentamos a retos en nuestra vida cotidiana que nos pueden sobrepasar: estrés en el trabajo, situaciones familiares complicadas, sensación de perdida de control sobre nuestra propia vida y un largo etcétera de obstáculos que pueden poner a prueba nuestra salud mental.
Aprender herramientas que nos permitan gestionar la ansiedad, el estrés, los pensamientos catastróficos, mejorando nuestro estilo de afrontamiento de problemas y encontrando soluciones a las situaciones que nos desequilibran, facilitará que restauremos nuestra salud mental y volver a disfrutar de nuestro día a día.